Más que un insulto, la indignación de esta banda británica se sintió durante su presentación en un programa de televisión donde su presentador les dijo que no tocarían y que solo harían playback. Matt Bellamy, el cantante de Muse, objetó y trató de hacer que la banda tocara en vivo. Sin embargo uno de los presentadores le dijo a los muchachos de Muse que los productores no dejan tocar en vivo y que con ellos no harían una excepción. Lejos de molestarse e irse, Matt aceptó y les propuso a los muchachos jugar una broma al programa ya que estos productores parecían conocerlos poco.
Grande para los fans fue la sorpresa cuando vieron que todos cambiaron sus puestos en escena. De modo que Matt tocaba la batería, Dom tocaba el bajo y Chris tocaba el teclado y la guitarra cambiando de instrumento y haciendo el ridículo adrede. Los presentadores, o bien actuaron como si nada pasara, o no sabían nada de esta agrupación. Ya que sus caras no decían mucho sobre lo que estaba pasando. Lo asumieron con naturalidad.
Por otra parte, todos los seguidores de Muse al enterarse de esta movida no pudieron sino amar más esta banda que con sentido del humor y astucia se imponen sobre las reglas con un espíritu punk. Grandes músicos e inteligentes.