Pronto el mundo conocería a los Sex Pistols. Cuando EMI los envió para sustituir a Queen en el programa de televisión Today, su infame entrevista con el presentador Bill Grundy se convirtió en el momento fundacional de la corta pero explosiva carrera de la banda. "La primera vez que vi a Johnny Rotten fue en el salón del primer piso de Wessex, en uno de esos sillones de pana que siempre estaban de moda en los años setenta. Vestía un suéter de angora color verde lima y tejanos rasgados, imperdibles clavados por todos lados y el pelo teñido del color marrón rojizo de los hámsteres, en punta y peinado con laca. A pesar de eso, parecía un tipo tranquilo y agradable, relajado mirando la tele ¿Dé dónde sacaban las historias sobre ellos? Ni siquiera se molestó cuando le pedí que cambiara de canal. no hubo un gruñido hosco, sino un simple encogimiento de hombros. Las pipas íbamos siempre desaliñados, pero los Pistols eran , una suerte de desaliño sociopolitico".
El año siguiente, Queen regreso a Wessex para grabar New Of The World. Los Sex Pistols también estaban allí, preparando su disco Never Mind The Bollocks. Tenian un nuevo bajista, y una tarde, mientras Queen trabajaba en la sala de control, Sid Vicius, apareció de repente en la puerta y pregunto a freddie de mala manera: "¿Ya has conseguido llevar el ballet a las masas?", en referencia a algo que Freddy había dicho a un periodista cuando comentó a lucir leotardos en escena.
Freddy se puso de pie con tranquilidad, se le acercó y le dijo bromeando:"¿Tú no te llamabas Stanley Ferocius o algo así?" luego lo agarro del cuello de la camisa y lo echo de la sala. Hasta ahí llego el lado malvado del punk. A Freddy no le interesaba aquel nuevo limitado movimiento musical. Y le interesaba aún menos su estilo de vestir.